El diputado provincial Ruben Contreras insistió con su argumentación de que Adosac está “fuera de toda norma al no acatar la conciliación obligatoria”. “El gobierno tuvo un gesto de diálogo en la audiencia de ayer por la tarde, y lo primero que tendría que haber hecho el gremio es acatar. Ahora, esto se endurece mucho más, y ojalá puedan los docentes recapacitar”, dijo en declaraciones al programa radial “Arriba Caleta”.
Después recriminó que “no puede ser que un grupo minoritario esté cortando los yacimientos, el ingreso a las plantas distribuidoras y deshidratadoras y afectando a toda una comunidad, a todos, a los empresarios, a los comerciantes y a la comunidad en general, porque no se puede producir con normalidad”.
El legislador kirchnerista agregó que los docentes de Adosac y Amet “bien podrían discutir lo salarial en el marco de la conciliación, donde se podrá discutir muchas cosas, los días caídos, etcétera”. Esto lo agregó porque el gremio insistió hoy, en declaraciones realizadas por sus dirigentes, que si el Ejecutivo hubiera planteado una mejora a la oferta del 25 por ciento, acatarían la conciliación obligatoria. Pero al no haber ninguna novedad, es por eso que Adosac permanece en su inmovilidad.
Contreras, en la entrevista que le hizo la FM Municipal 100.3 Mhz de Caleta Olivia, replicó que si el Ejecutivo dialoga con los docentes fuera de la conciliación, “en el futuro ningún gremio la acatará cuando se dicte, porque se genera un antecedente muy equívoco”.
Remarcó que existe la “herramienta válida que es la paritaria, a la cual se adhirieron todos los gremios. ATE, UPCN, APAP, Fentos, la Fetram, todos acatan las conciliaciones obligatorias, y con la mayoría se ha llegado a consensos. Si acatasen los de Adosac seguramente se llegará a un acuerdo”, agregó.
Pero luego el diputado mostró “gran preocupación” porque Sinopec anunció que “para su producción, y todos estos días caídos no se les va a pagar la gente”.
“El otro día, cuando dije que había que convocar a petroleros, camioneros; no lo manifesté para sacar a la gente que estaba haciendo piquete, sino para pedirles pacíficamente. No fue un mensaje de patoterismo, como muchos me criticaron.
De todas maneras pienso que por qué se le va a impedir a otras personas, no sólo trabajar, sino cobrar sus sueldos. Sinopec para la producción y no le va a pagar a las contratistas, ni a los camioneros, ni a la gente petrolera, eso lo deben entender todos”, añadió. “También lo hará YPF, y PAE está en la misma sintonía. Esto, si continúa así, va a generar un caos terrible. Espero que levanten la toma de yacimientos. La provincia está perdiendo entre 4 millones y 4 millones y medio de pesos por día”, añadió.
Además, Contreras conjeturó que los docentes y militantes de Suteba, Partido Obrero, CTA, entre otras entidades gremiales y partidarias que vinieron a solidarizarse con los maestros santacruceños en huelga “vinieron a alimentar más el conflicto en Santa Cruz”.
“Escuchaba ayer a docentes y gente que opinaba, y decían que esto tenía que ir ‘hasta el triunfo final’ como si todo fuera un partido de fútbol y esto no es una competencia, acá esta en juego la educación de nuestros hijos y de todos los que viven en la Provincia”, discurrió.
Por otra parte, Contreras replicó a Adosac que plantea que el paro es mayoritario. “No es así. En Puerto Deseado, en Calafate, en Gallegos, en Gregores la activad áulica es casi normal. Por ejemplo, en Río Gallegos hay un 25 por ciento de acatamiento, y en otras localidades menos todavía. Y no es que haya diferencia de sueldo entre esas ciudades y las que mantienen la huelga más activa, puede haber sólo diferencia en algunos lugares como Calafate que cobra 180 % de zona”.
Sobre la controversia de los subsidios
En otro orden de cosas, Contreras quiso aclarar cómo se originó la controversia con el ministro José Manuel Códoba acerca de los subsidios que éste entrega en Caleta.
En principio, aclaró que él no envió a nadie, ni confeccionó ninguna lista para que vayan a pedirle subsidios al funcionario provincial.
“En el partido justicalista hay un grupo de jóvenes militantes que trabajan conmigo hace un tiempo. Hay gente que tiene necesidades y otros que no. Varios de esos chicos fueron por su propia cuenta a pedir subsidios. Desde la Casa Peronista no se hizo un listado, ni yo mandé a nadie un listado. Esos jóvenes no fueron por parte de una agrupación o por parte del partido a buscar el subsidio. Eso sí, si lo dan a los subsidios desocupados y había jóvenes del partido que lo son, tienen todo el derecho a pedirlo. Pero, reitero, yo no mandé a nadie a pedirlo”, explicó.
“De todas maneras, con respecto a los subsidios, yo opino que a la mayoría que está solicitando subsidios, lo mejor es capacitarlos para que aprendan algún oficio. La mayoría no estudia, y vos les preguntás qué saben hacer y la mayoría contesta: ‘es mi primera búsqueda de trabajo’. Y eso es así porque tienen entre 18 y 20 años de edad”.
“Mi propuesta es la capacitación, antes que el subsidio. No estoy de acuerdo con esa política. Coincido en muchas cosas con el ministro Córdoba, pero en este tema no”, comentó.
“Además el marco regulatorio para la renegociación de áreas petroleras manifiesta que las operadoras deben hacerse cargo de la capacitación de las personas de la zona y después se los inserte en el trabajo. En cambio, no es conducente que sólo se les dé dinero”, dijo.
“Aparte hay que hacer un entrecruzamiento de datos de los que actualmente están cobrando subsidios. Por ejemplo, vemos que hay gente que trabaja en taxis o remises, que ganan 100 o 120 pesos por día, y que, además, van a cobrar ese subsidio, o sea que terminan cobrando como un empleado de comercio, o uno de la ‘591’, quienes trabajan todos los días, más de ocho horas. Y eso es injusto”.
Contreras puntualizó que la entrega de subsidios, en todo caso, se debe dar a los que más los necesiten, porque vemos que entre los que piden “hay hijos de empleados municipales, provinciales, de docentes o de petroleros. No niego que haya gente que necesita la ayuda. Por otra parte, la entrega de subsidios por parte del Ministerio de Gobierno es contradictorio, porque todavía no cobraron los beneficiarios de las tarjetas sociales que dependen del Ministerio de Asuntos Sociales, y hay otros lugares, como en los hospitales o en los centros de salud donde se necesita asistencia financiera y todavía no llega”, precisó.
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